Bienvenida Primavera!!! Y no viene sola, sino que también viene acompañada del "Día de la Felicidad"!!!!Hoy ha comenzado el día de una manera un poco extraña. Dónde estaba el sol? Le ha costado salir, y, de hecho, se le ha visto poco. A pesar de eso, miro el día con positividad ya que entramos en una nueva época en la que los días son más largos y podemos disfrutar de más tiempo para hacer las cosas que nos gustan.
Esta no es la primera vez que me pasa. Recuerdo otro día nublado como el de hoy, pero que, a pesar de ello, disfruté de una experiencia maravillosa. Hace poco, varios amigos decidimos irnos a Laujar y hacer la ruta de la hidroelétrica. La hicimos, e incluso mezclamos 2 de las rutas que hay, porque somos así de "guays": ruta de la hidroeléctrica y la del Aguadero. He de decir que me cuesta eso de moverme y el deporte, pero me gusta la idea de ver paisajes y poder respirar aire puro.
Comenzamos la caminata y la subida fue un poco dura, pero cuando llegamos al primer mirador... sin palabras. ¿Cómo es posible que subiendo un poco la montaña puedas ver un paisaje tan bonito? Cuando llegamos allí lo único que pude hacer fue sentarme, mirar esa imagen, y perderme en esa pureza y tranquilidad.
Conforme íbamos avanzando, más fácil se iba haciendo el camino, y nos íbamos adentrando en las profundidades del bosque. Las rocas iban sobresaliendo por el camino, y entre risas y bromas empezamos a escuchar el sonido del agua. Nos acercamos y una cascada caía... ¡Cómo me encanta escuchar el sonido del agua!. Muy cerca estaba el río, y bebí de ese agua tan pura (no me ha pasado nada por beberla, así que confirmo que es pura jejjejeej).
Cuando llegamos al final de la ruta, comenzamos la vuelta, y nos empezó a chispear un poco, pero los sobrellevábamos. Cómo íbamos bastante bien de tiempo, decidimos adentrarnos en una cueva. ¿Porqué lo haríamos? Nos encontrámos una cabra muerta!! Su cuerpo (bueno, sus huesos) inerte yacía acostado en ese suelo húmedo. No os pongo la foto para no herir vuestra sensibilidad, pero si me lo pedís lo hago ;)Nos dimos la vuelta y volvimos por la segunda ruta. Que preciosidad!! El camino iba bordeando la montaña, a muchos metros del suelo, y se veía todo desde la otra perspectiva. A pesar de que estaba lloviendo (no se aprecia en la foto) no dejabas de sentir una calma que sólo te la da la tranquilidad de la naturaleza.
Para quienes seáis de Almería os recomiendo que la hagáis, si sois de otra ciudad o de otro país,también. Porque no todo se queda en andar, eh?? Que todo esfuerzo tiene su recompensa. No puedo engañaros, después de andar, me comí un plato alpujereño tremendo, con sus patatas a lo pobre, chorizo, morcilla, jamón... ñam, ñam y solomillo de ternera. El cuerpo se queda flojo y no tenemos que ponernos en riesgo :p
Si tenéis vosotros alguna experiencia bonita, también me gustaría que la comentáseis para que podamos volar con nuestra imaginación... Besos!!
